El desarme de un motor puede darse por varias razones, por ejemplo, como resultado de una falla, por síntomas de una falla inminente, o debido a que la unidad ha llegado a su edad de overhaul. Por cualquiera de estas razones, un overhaul representa una excelente oportunidad de mejorar el desempeño del mantenimiento predictivo. Las observaciones efectuadas durante la reconstrucción son indispensables para la optimización de CBM e a través del análisis EXAKT. El overhaul puede revelar un conjunto de puntos (muestras) de ciclo de vida a nivel de modo de falla.
Un Modo de Falla describe el evento debido al cual una parte cambia su estado hasta el punto que comprometa la función de un sistema requerido. Los modos de falla de un componente principal (por ejemplo de un motor o mando final) pueden ser identificados únicamente después del desarme. Nosotros no debemos asumir que cuando un equipo en la flota presente un síntoma, por ejemplo un signo vital anormal o un resultado elevado de análisis de aceite, este solo se constituya en un punto de muestra de falla para un modelo de EXAKT. La falla debe ser confirmada en el desarme. Solamente en ese momento puede ser usada como un punto en una muestra para cualquier tipo de análisis de confiabilidad.
En cambio, un motor que es reconstruido luego de haber alcanzado su vida útil predeterminada podría aún presentar desgaste avanzado hasta el punto de que se considere que ha fallado “potencialmente”. Esa es una falla que es considerada, a juicio de los técnicos o del analista de falla, como inminente en cuestión de horas o días. Obviamente, para emitir este juicio, la organización debe, mediante el consenso de los técnicos y analistas de falla, desarrollar gradualmente estándares para distinguir entre suspensión y falla. Registros fotográficos y otros tipos de información valiosa son de
utilidad en estos casos.
El desarme programado de un motor a la edad de 18988 horas detectó un avanzado desgaste de los cojinetes de biela en las posiciones 7 y 8. Las fotos muestran la condición del cigüeñal en la posición B7-A7 y de los cojinetes de biela en las posiciones B7-A7, B8-A8. En las otras posiciones del cigüeñal, el desgaste era mucho menos pronunciado, o normal.
El analista de falla puede por lo general identificar el modo de falla directamente responsable de la falla. Adicionalmente puede también identificar fallas potenciales que se presenten en otras partes del motor. Un proceso de investigación estandarizado proporciona información detallada acerca del estado real del motor al momento del desarme. Los verdaderos estados de cada modo defalla relevante se constituyen en un punto de muestra para el desarrollo de un modelo de decisión. Mientras más exacta sea la descripción del modo de falla y su evento de terminación (Falla o Suspensión), más confianza se podrá asignar a las decisiones que surjan del modelo.
Un motor desmontado, ya sea por falla funcional o no, es una rica fuente de información vital para el análisis de confiabilidad. El motor nos revela sus secretos de comportamiento de modo de falla. Sin embargo, por lo general los motores que han completado su ciclo de vida programado no son sometidos a análisis de falla antes de que estos entren a reconstruccion. Por lo tanto se supone erróneamente que todos los modos de falla en el motor fueron suspendidos en lugar de que hayan fallado potencialmente. El error de esta suposición es evidente en el caso descrito anteriormente. Ignorar o confundir fallas y suspensiones tendrá como consecuencia modelos de decisión CBM con pobre desempeño predictivo.
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